VOLVER A CREER
¿Cómo es que nuestro país eligió a un hombre que salió del riachuelo, de la boca bostera y hoy es Presidente?
¿Será por el oro de la camiseta? ¿Será por sus dones mandatarios y empresariales? ¿O será que en Argentina ser político es más fácil que ganar una copa libertadores?
La pelota es lo que identifica a este país, y no es de extrañar que todo tiene que ver con todo…
La pregunta es ¿Cómo y por qué ganó? Lo real y concreto es que la gente está cansada. Cansada de la corrupción, mentiras y robos. Mauricio ganó con Boca más títulos que con cualquier otro presidente. ¿Acaso es por la fama y por su hinchada? ¿O realmente la gente se enfoca en un cambio político?
Las cajas se llenaron de sobres con boletas de Cambiemos. Muchos de esos votos pueden haber sido porque les gusta su partido político, porque lo hacen en contra de Cristina sin fijarse a quien votan, o por razones bosteras.
Aunque también está el lado opositor al ingeniero, quienes lo llaman “gato” ¿Por qué le dicen así? ¿Realmente desprecia al que está en inferioridad de condiciones, como dicen esos pibes?
Ningún gobierno es 0% corrupto. Todos tienen sus errores. Decir que un presidente hace todo a la perfección, es como pensar que tu hijo nunca tiene la culpa de los mocos que se manda. El actual mandato todavía no cumple 2 años desde que asumió. El de los K estuvo 12 años en el poder. Lo juzgan al bostero, pero hay que darle tiempo.
Es difícil confiar cuando nos dejaron desnudos. Si no creemos en nosotros mismos, ¿Cómo algún otro país va a confiar en nosotros? Eso nos hace falta, volver a creer.
Aún no estamos muertos, ni derrotados. Argentina sigue de pie como puede, sino este país no funcionaría. Necesitamos que todos, y no solo algunos, salgan a laburar. Nada cae del cielo.
Tener esperanzas en que se puede cambiar. Macri está en el poder de nuestro país, apostemos unas fichas. ¿Será el hombre que cambiará a Argentina? Es complicado arreglar lo que arruinaron en los últimos años, pero seguir con esa política, nos iba a matar, seamos hinchas y vamos a las canchas, que el fútbol nos aclama.
